LA CONVERSACIÓN ES UN VALOR AMENZADO
Entrevista con David le Breton. El antropólogo francés sostiene que se ha perdido el sentimiento de solidaridad y destaca el caminar como refugio.
Profesor de sociología y antropología en la Universidad de Estrasburgo, David le Breton en su último libro “Elogio del caminar” reivindica el caminar como una forma de rebeldía contra un mundo donde sólo cuenta la productividad. Lleva años investigando a través de trabajo de campo, las conductas de riesgo de las nuevas generaciones.
-Siento, ¿luego soy?
–Para Descartes la filosofía empezaba cuando cerramos los ojos, pero en realidad nuestra relación con el mundo es una experiencia física, sensorial y afectiva.
-Últimamente no nos llevamos muy bien con nuestro cuerpo.
– La ideología de los años sesenta era cambiar el mundo; hoy es cambiar mi cuerpo a través de la cosmética, la cirugía, los implantes, las dietas…
-Un sufrimiento para muchos.
-Hoy el cuerpo es como una prótesis de la identidad, de la que hay que tomar posesión agregándole una impronta propia.
-¿Y lo hacemos a través del consumo?
-Sí. El tatuaje lo ilustra muy bien: cada uno pretende diferenciarse con su tatuaje, pero los grafismos son limitados, así que hay millones de personas que llevan el mismo. Creo que es una metáfora del mundo de hoy.
-La masificación.
-Sí, la necesidad de desaparecer de sí, que significa no soportar las responsabilidades inherentes a nuestra identidad social, profesional, amistosa, familiar…
-Demasiados frentes abiertos.
-Es el sentimiento de estar saturado de uno-mismo, es ese esfuerzo permanente que nos lleva a ese deseo de huir, de no estar ahí.
-¿Y nos aislamos?
-Hay fórmulas felices como caminar, viajar o dedicar tiempo a la jardinería, y otras dolorosas como la depresión o las drogas. Cada uno de nosotros es un continente, y hay gente que no quiere puentes. Cada uno de nosotros es inmenso, tenemos innumerables personalidades que se manifiestan según las circunstancias, pero vivimos en un mundo de repliegue en nosotros mismo y en el mundo virtual.
-¿Eso provoca que la comunicación haya arrinconado la conversación?
-Sí, porque la comunicación que pasa por medios tecnológicos es utilitaria. La conversación implica el cuerpo, el rostro, la voz, la presencia, la atención para con el otro. La conversación es uno de los valores más amenazados y más preciado del mundo de hoy.
-¿Qué ha entendido del ser humano?
-Somos criaturas de sentido, de significado. Sólo existen las interpretaciones que nosotros hacemos del mundo que nos rodea, y por tanto, sólo hay mundo si hay mirada. Y hay millones de interpretaciones, pero hoy nuestra mirada está muy mediatizada.
-¿Y el refugio que propone es caminar?
-El deseo de vuelta a la naturaleza es una realidad que responde a una necesidad de cambio de valores. Cada vez el número de personas que caminan por el mundo aumenta, y los caminantes son solidarios y abiertos.
-¿Cada vez menos juntos y más apiñados?
-La globalización es un hecho, de manera que deberíamos ser cada vez más ciudadanos del mundo, pero sin embargo hemos perdido el sentimiento de solidaridad. Somos individuos aislados buscando un reconocimiento.
Por Xavier Cervera Revista Ñ 11-01-2020