LA CAÍDA DEL HOMBRE PRIMORDIAL
En el imaginario cultural actual, cada vez más, existe la concepción del ser humano como algo degradado. Si bien el desarrollo de la ciencia y de la tecnología ha sido enorme, el hombre actual, en su ser esencial, se ha ido empobreciendo cada vez más. La caída del hombre primordial.
La caída del hombre primordial.
En todas las tradiciones sapienciales se habla del hombre caído o de la caída del hombre.
¿De dónde ha caído el hombre?
El hombre, dicen, ha caído de su primordialidad, de su originalidad, de su esencia.
La caída del hombre primordial es un mitema, un núcleo de significados que aparece en diferentes tradiciones. Lo que cuentan es que el hombre completo vivía en su origen, vivía en su originalidad, en su esencia. Es decir, que el origen es lo esencial, es el núcleo, es el centro, es lo primordial. Y ahí radicaba su estado de plenitud.
¿Cómo se produce la caída?
El hombre completo, estaba en las esferas celestes y cuando vio su reflejo en la naturaleza húmeda es decir, se vio reflejado en las aguas, se enamoró de sí mismo y cayó desde su lugar celeste a este lugar terrestre.
La imagen expresa que la caída se produce por narcisismo, el hombre se enamora de sí mismo y cae. Esa es su maldición, quedar absolutamente obsesionado consigo mismo y haberse olvidado de su origen.
Por eso, dicen las tradiciones, que lo principal de la condición humana no es la muerte, lo principal es que vivimos dormidos que es mucho más terrible. El sueño del ser humano significa que cada uno vive en su mundo particular y propio y que no es capaz de abrir los ojos a la realidad.
El hombre dormido es el que vive en la inmediatez de una conciencia superficial que es absolutamente manejable. Somos un atado de creencias, de hábitos y de automatismos y con esa maquinaria vemos el mundo y estamos seguros que las cosas son así, como nosotros creemos.
Entonces este microcosmos, que es el ser humano, si quiere llegar al conocimiento de su propia naturaleza tiene que purificar el ojo de la mente, tiene que limpiar su corazón, entonces podrá percibir algo más. Si no, estará cerrado, porque está caído.
Por Lic. Susana Stacco